13 diciembre 2006

hoy ha amanecido con mucha luz




hoy ha amanecido con mucha luz.




Aunque la metereología no mande en nuestras vidas, hay días que da gusto abrir la ventana y encontrarse con luz, con mucha luz, como si fuera el presagio de la felicidad que puede entrar en nuestras vidas, como si fuera el inicio de otra subida en este vaivén de felicidades y tristezas, de gozos y preocupaciones en que se convierte la mayoría de nuestras vidas.




La cabeza me dice que puede ser un engaño y yo me dejo engañar. La fría mente no quiere fiarse y quiere esperar a ver si las cosas realmente vienen con mucha luz. El corazón de mis sentimientos se vuelca en el papel y sueña, desea soñar y sentir esta luz que me inunda la casa.




Eterna lucha entre cabeza y corazón, vaivenes donde a veces sube una y baja la otra. Lucha en la que siempre acabo cansado, con una sonrisa de esperanza para otro mañana también luminoso, pero cansado.




Ahora, mientras miro por la ventana y observo cómo la luz lo ilumina todo, disfruto y cargo fuerzas para seguir siendo parte de esa eterna lucha. Quiero seguir viviéndola, aunque me canse.


Mientras espero a que el día se pause y me lance sus vaivenes, gozo de esa luz en mi mirada.


Que todos tengamos un día luminoso.


Un abrazo.




Modesto, 13 de diciembre de 2006