13 agosto 2007

Desempolvando recuerdos




En algún rincón de mi alma, esa cosa que nunca sabemos dónde está, pero que nos duele de vez en cuando para demostrarnos su existencia, escondí las emociones que me provocaban los recuerdos de infancia, retazos de conversaciones donde personajes que me sonaban cercanos hablaban con voces lejanas, de cosas que mis ojos de niño no conseguían desentrañar del todo.

En otro rincón de mi mente, disco duro con fecha de caducidad y límite de capacidad, guardo las fotografías de aquellos momentos, como en un álbum personalizado, intentando conservar con vida el recuerdo de las personas que se me han ido, mis padres, algún amigo…

Pero la realidad que me rodea, la que nunca deja de sorprenderme con novedades dolorosas y alegres a pares, me devuelve a la parte de delante de la casa de mi mente y de mi alma. Algunos días vuelvo a aquellos rincones y me siento, en silencio y con poca luz, a recordar y a sentir. Otros días dejo que una suave capa de polvo se acumule sobre los recuerdos, para poder limpiarlos otra vez.

Por algún motivo que desconozco, empecé hace unos años una colección de pins, de insignias de lugares y de cosas que, cuando me siento a contemplarlos, me traen recuerdos de sitios donde he estado, de personas que me las han regalado, o con las que he compartido momentos y sensaciones, comidas y conversaciones… muchos recuerdos.

Quizá sea ese el motivo por el que dejo que se pose el polvo del tiempo sobre los cuadernos donde los guardo para, de vez en cuando, volver a retomar la colección, colocar los nuevos en su sitio y recontarlos, volver a pararme en el de Londres, Asturias, Barcelona, Pamplona...las fiestas y sus personajes… quizá sea el motivo por el que alguna tarde triste y con tiempo de sobra, paso página a página y repaso los colores que dejan en esos rincones de mi alma y de mi mente, o ¿serán la misma cosa que no logro deslindar cuando me duele o cuando sonríe de alegría? Un abrazo.
P.D. La colección ahora está en 862 pins. Entre mis hijos, amigos y demás... ya os contaré. En las fotos algunos ejemplares que podéis ampliar.