30 abril 2007

recuperando viejos y queridos recuerdos

(foto del Mercat de la Boquería, en Barcelona)


Hace unos días, leía en el blog de El Avispo, blogero amigo de muchas de las páginas por las que me muevo, la idea de recuperar algunas entradas de las viejas, de los post que hicimos con cariño y que nadie leyó, que se quedaron sin respuesta y huérfanos de comentarios.

Yo, como cocinero y poeta, necesito, en un caso al comensal que me devuelva el "uhmm, que rico" y, en el otro, al lector o destinatario del poema que, emocionado, me devuelva con la mirada la certeza de haber completado el ciclo creador en su emoción. Además, como profesor, también necesito ver en los ojos de mis alumnos-as la sensación de recepción de mi intento de educación.

Sin abusar de vuestra paciencia os propongo dos de poesía y otra de cocina.

Tres pintxos para sorprender (pinchos les llamamos a pequeñas raciones para picotear)

Una puerta mágica (dedicada a mi primo Honori y a su padre, también Honori)

Una nana en tres actos (para todas las madres y sus hijas)

Gracias por vuestra lectura y, si preparáis los pintxos, on egin, buen provecho.