Hoy quiero escribirte un poema con las manos, donde las palabras se entrelacen mezclando los colores en sus frases, brillando cada vez que me acerque a tu cuerpo, sonando cada vez que suspire mi canto.
Quiero dibujarte entre las sombras de esos árboles que apenas dejan pasar el sol, tibio y caluroso, en la tarde de primavera.
Hoy quiero saborearte palabra a palabra, gesto a gesto , y no dejarme rincón de piel sin concoer ni aroma y sabor sin paladear.
Quisiera que la tarde durase eternamente y las palabras se alargaran en el tiempo y mis manos... ¡lo que darían mis manos porque no llegara la noche!
Hoy quiero quererte y en ese acto de voluntad repetida, sentir los colores, los brillos, los sonidos y la vida que enajena la sensación de tiempo y de distancia.
Quiero dibujarte entre las sombras de esos árboles que apenas dejan pasar el sol, tibio y caluroso, en la tarde de primavera.
Hoy quiero saborearte palabra a palabra, gesto a gesto , y no dejarme rincón de piel sin concoer ni aroma y sabor sin paladear.
Quisiera que la tarde durase eternamente y las palabras se alargaran en el tiempo y mis manos... ¡lo que darían mis manos porque no llegara la noche!
Hoy quiero quererte y en ese acto de voluntad repetida, sentir los colores, los brillos, los sonidos y la vida que enajena la sensación de tiempo y de distancia.
¡Ay!¡qué bonito es quererte!
On egin, Modes