31 octubre 2006

la vieja escalera de mi vida y de la vuestra

Una vieja escalera, los miles de pasos de los cientos de personas que han subido y bajado por ella durante los últimos cien años. Una vieja escalera, los besos a escondidas, los abrazos más tiernos y los gritos más ásperos, las sonrisas más brillantes y las miradas oscuras de desprecio. Vértigo de tantos miles de días con historias repetidas y siempre nuevas.

Un escalera vivida, una escalera mágica donde los recuerdos suben y bajan, igual que en mi memoria. ¿Tendrá escaleras mi cabeza? ¿Subirán las ideas mirándose con cariño, o con dolor, o con miedo? ¿Bajarán las sensaciones saludándose entre si, como viejas conocidas? ¿vivirán las emociones conversaciones sobre el tiempo, sobre la familia y qué tal?

Una imagen muy nítida. La escalera como metáfora del transcurrir del tiempo, ella se mantiene mientras nosotros-as envejecemos y cambiamos poco a poco. Ella mantiene su mármol intacto, casi inmune al paso del tiempo y nosotros-as crecemos, empequeñecemos, envejecemos subiendo y bajando esas escaleras de la vida.

Un deseo: que, cuando nos cueste subir, fatigados por el peso de los años, o por el peso de la vida, sigamos comunicándonos, sigamos hablando con los que suben y bajan, sigamos sintiendo el paso del tiempo en nuestras almas y en nuestras manos, mientras nos agarramos al pasamanos y seguimos adelante.

En los momentos difíciles, cuando más nos cuesta subir las escaleras y sentir las fuerzas para seguir, busquemos una sonrisa de otro-a que baja, de otro-a que sube y saluda; que saludemos con cariño a los que comparten esa escalera con nosotros.

Hoy me cuesta escribir, busco vuestra sonrisa, busco vuestro saludo, la sonrisa y el saludo de los que compartís conmigo esta escalera de la vida, de mi vida y de la vuestra.

Modesto, 31 octubre 2006

la amistad, como la poesía

Esto de los blogs es algo que me ha hecho pensar en el proceso de creación y distribución de la poesía. Yo creo los poemas, siempre con la idea de que no serán completos del todo hasta que lleguen al lector y éste sienta algo, piense, llore, sonría o exprese cualquiera de las emociones que puede hacerle sentir. Un poema se acaba cuando el receptor del mismo devuelve una sonrisa o manda unas palabras al creador del mismo.
El blog está funcionando parecido. Yo escribo unas recetas, unos poemas, unas reflexiones y los amigos-as que las leen me devuelven unas palabras, una sonrisa... En esto la amistad y la poesía coinciden, no se completan hasta que la respuesta suscitada en el receptor vuelve al emisor.
Algo así intenté expresar en este poema:
En unos versos plasmar lo que siento quisiera
cincelar la palabra y que llegue a tu lado
reposando la idea, compartiendo calmado
mi sentir, mi vivir, lo que hoy soy, lo que era

añadiendo mis anhelos, saltar la ladera
que une a las personas, al oyente callado
y al poeta que intenta entregar acabado
la razón y el sentir cincelados en madera.

Si además, aunque poco, surgiera belleza
sólo faltará que vuelva el mensaje emitido
tañendo dulce en tu alma una canción, lector

recibir su sonido en la mía, la certeza
ser escuchado, aceptado, saberme vivido
cerrar el poema, verme contigo, creador.
Espero que sigamos manteniendo esta comunicación
Modesto 31 octubre 2006

unos cuantos pinchos para variar




Brocheta de pulpo y langostinos:

Una vez cocido el pulpo (o comprado) y los langostinos (pueden ponerse al ajillo o cocido) se colocan en las brochetas, un trozo de pulpo y un langostino alternativamente. Conviene poner el pulpo y los langostinos al través para que queden bien planos. Se colocan tres trozos de cada.

Después de preparadas las brochetas se pasan por la plancha y, una vez bien doraditas, se aliñan como siempre se aliña el pulpo, pero poco, para que no se coma el sabor de los langostinos (pimentón y un chorrito de aceite virgen cruda).
Servir en una fuente varias brochetas, con unas manchas de aliño.


Pincho de bacalao marinado:

Marinar un buen trozo de bacalao fresco: mantener sumergido el pescado unas horas en una mezcla de vinagre, agua (a partes iguales), un chorretón de vino blanco y sal.
Preparar unas patatas cocidas y unos pimientos del piquillo. También unas rebanadas muy finas de pan, tostado o no, al gusto.

Colocar el pan, la patata, una lámina de bacalao y encima el piquillo (con la mitad vale).
Para aliñar se puede preparar en un vaso grande o similar, aceite, vinagre, cebolleta muy picada y pimiento verde muy picadito. Sazonar y echar con una cucharita un poco por encima.


Pincho de calabacín con anchoas:

Pasar por la plancha el calabacín, cortado en láminas finas y alargadas. Cortar unos cuadrados de calabacín y reservar.
Pasar las anchoas frescas en la plancha o en una sartén con una gota de aceite.

Sobre una lámina de pan tostado o no (al gusto de cada cual) colocar el calabacín y una anchoa. Verter encima unas gotas de aceite crudo.
Otro día se pueden mezclar anchoas frescas y en salazón.
On egin, Modesto 31 octubre 2006

30 octubre 2006

un abrazo desde mi ventana

Reproduzco el texto de una presentación que he hecho hoy y que he enviado a casi todos mis amigos. Un abrazo desde mi ventana.


Hay ventanas que dan a la calle, otras que reflejan el pasado y el tiempo; hay otras que dan al alma del poeta y nos reflejan los sentimientos. Otras pueden dar al futuro y nos alimentan la esperanza y los miedos. Hay ventanas que dan a la cocina y al hogar donde hemos crecido. Hay ventanas que lloran flores como lágrimas de colores y otras que ríen música de luces tornasoladas. Hay ventanas que dan al arte y otras que nos llaman con focos de pasiones. Hay una ventana que sólo da al interior de cada uno, suele estar cerrada, salvo para los grandes amigos.
Un abrazo desde mi ventana.

asadurilla de cordero


Vuelco aquí otra receta de mi madre, ahora que está enferma en el hospital, recordando las veces y veces que nos ha preparado estos y otros muchos platos. On egin


ASADURILLA DE CORDERO


Ingredientes:
1 asadura de cordero de leche o cabrito
1 cebolla
3 dientes de ajo
1/2 cucharada de harina
1 cucharada de café de pimentón
Agua y/o vino blanco
Aceite y Sal
Se sofríen en una sartén con el aceite la cebolla y el ajo, y cuando estén bien pochados, se añade la asadurilla bien lavada y en trozos pequeños. Cuando está hecha, se añade pimentón, agua (o mezcla con vino blanco) y pimiento rojo seco. Si la salsa no está espesa, se puede añadir algo de harina y dejar cocer un rato, hasta que la salsa esté al gusto de espesor.

ventanas llenas de luz tenue


Hay días en que las ventanas nos inundan con luces tenues el alma. En que los rayos optimistas nos reflejan la belleza del exterior y nuestro interior se mece suavemente, se despereza de su tristeza anterior y mira con más claridad hacia adelante. Es la sonrisa de una mujer, la llamada de un amigo, un abrazo lo que desencadena en mí este rayo de optimismo y esa mirada hacia la belleza de la ventana.

Quiero rescatar otro poema y dedicárselo a mi mujer, agradeciéndole muchas bellas mañanas.

Momentos de placer atemporales


Me miras a los ojos y presiento
piel y sangre ardiendo en tu mirada
imán queme atrae hacia tu nada
me falta, por faltarme, hasta el aliento.
Quiero plasmar el mundo en un momento
lanzarte mis desmanes en manada
susurrar la canción nunca cantada
ser de tu sed de amor el alimento

Envuelta frente a mí en suaves tules
gózame y aplaca el dulce tormento
que hiere mi piel con mil cristales

Guía mis sentidos hasta los azules
cielos donde acaba el sufrimiento
placer y amor de sueños inmortales.
Modesto, 30 octubre 2006

25 octubre 2006

la puerta de la esperanza


No sé si sabréis que esta puerta es mágica.


Es una puerta muy especial que tiene un primo mío en su casa.


Es una puerta que lleva a donde tú quieres que te lleve, es una puerta abierta a los adentros de cada persona, a las afueras de cada alma.


Hay días que parece no llevarnos a ningún sitio, y hay otros que parece prometernos todo lo mejor que puede esperarse del futuro. Hay días que la abrimos y se nos aparece nuestro pasado, como en una película vieja, en blanco y negro, y hay otros en que la luz inunda de colores las esperanzas de nuestro futuro.


Es una puerta muy especial, como mi primo, una persona muy especial de la que, siempre, puedes esperar cariño y abrazo, como de la puerta al abrirla.


Hoy, día en que la esperanza ha bailado por momentos en mi alma, en que el blanco y el negro han convivido con los mil colores de la alegría, me he acrodado de Honori, mi primo y le dedico este recuerdo, además de colocar en el blog la poesía que, emocionado, escribí para su padre Honori también, cuando murió.


Un abrazo, primo.


HONORI

Hoy vuelves a ser parte de la tierra
que hiciste fructificar con tu mano
de hombre robusto, de vital riojano
entre viñas a la sombra de la sierra.

Tu alegría vivirá con nosotros,
sonreiremos al prender el fuego
del almuerzo en la vendimia y luego
repartiremos tu alegría a otros.

Amigo fiel de charla inteligente
a los montes del norte, y a su viento
gritaremos tu nombre, y al momento
todos sabrán que fuiste buena gente.

Descansa en la memoria de los vivos,
nos veremos en otro frontón, al otro lado
donde conviven futuro y pasado,
viñas de otoño, frutales y olivos.


Un abrazo también para todos-as que llenáis de sentido este blog, con vuestras respuestas y comentarios.


Modesto, 25 octubre 2006

24 octubre 2006

poema a un viejo tejo


Cuando escribo algunos poemas, las metáforas son recurrentes, como esta del árbol como persona y en este caso, árboles que guardan los recuerdos, poetas, cantores... representados en tejos ( yo mismo soy uno). En el caso de este poema no hablo a ninguna persona en particular, pero está presente el recuerdo de las personas que se nos fueron y que desde la otra orilla (si es que existe) nos recordarán como les recordamos nosotros a ellos.
La foto es de un tejo que planté con mis amigos-as, haciendo realidad un cuento: ¨Árboles con alma"


Ahora tú, viejo tejo engalanado
de verde oscuro, escucha mis canciones
tú que ya tienes más de mil estaciones
y estás más cerca de aquel que de este lado.

Tú guardas en la memoria, en sagrado
los recuerdos, las vivencias y los sones
de antiguos, vividos, sabios corazones
recuerdos que en tu tronco se han marcado.

Antes que escuchemos la triste campana
desde la torre anunciando tu partida
fatal llamada que a todos nos desgrana,

siente la vida en tu memoria fundida
guárdala siempre en tu nueva alma lejana
cántale al bosque tu postrer despedida

Modesto, 24 octubre 2006

23 octubre 2006

una foto en La Boquería


Para romper un poco la monotonía, aquí va una foto de las varias maravillosas que se pueden hacer en el mercat de la Boquería de Barcelona.

poema a una amiga, a Izas.

En esta época, en que estoy recibiendo tantas muestras de cariño y atenciones para preguntar qué tal y desear las mejores suertes, quiero recuperar un poema que escribí hace un tiempo a una amiga. Que lo disfrutéis como las r ecetas de cocina, degustándolo poco a poco en el paladar del alma.


Gracias
por devolverme agrandado
mi cariño y mi sentir
por entregarme cuidados
mis emociones, mis miedos
por ser espejo leal
de la amistad entre gente,
por compartir lo que siento.

Quiero mandarte mis pensamientos.
Que tu superficie acoja
mi vida sentida,
segmentada en mil imágenes,
mejorada en tu reflejo
de espejo elegante y fiel.
Que la imagen que me llegue
dulcifique lo vivido,
acune mi actual sentir
y llene de luz muy nueva
el futuro que me espera
detrás del bello cristal.

Gracias
por ser mi amiga.
que tus ojos, en la distancia,
me dediquen una sonrisa.

Modesto, octubre 2006

tallarines con litiruelas y salsa roquefort

tallarines con litiruelas

Trocear las litiruelas en dados grandes, pasar por pan rallado, después de salar, y freir en abundante aceite caliente. En una sartén aparte, chorretón de aceite y dos porciones de queso roquefort hasta que se deshaga; después añadiremos nata líquida al gusto para lograr una salsa de queso rica.
Cocer los tallarines al gusto de cada cual.
Para servir, sobre un buen nido de tallarines, colocaremos unos trozos de litiruelas fritas y rociaremos con una poco de la salsa.
Junto a los platos, colocar la salsera para que cada uno se añada lo que quiera y las demás litiruelas, para añadir cada cual según sus preferencias.
On egin!
Modesto, 23 octubre 2006.

22 octubre 2006

Revueltos muy jugosos. On egin!

Aunque lo ideal es que cada uno se atreva con mezclas nuevas, aquí van dos ejemplos que me suelen preguntar a menudo:
Revueltos muy jugosos

1- Bacalao, gambas y piquillos:
Pasar el bacalao fresco en una sartén y luego desespinar. Pasar las gambas y dejar a medio hacer. Pasar los piquillos y trocear en trozos pequeños.
Rehogar todo y añadir abundante huevo, para que salga bien jugoso.

2- Morcilla y piquillos:
Destripar la morcilla de aroz y trocear en pequeño. Añadir piquillos muy troceaditos. A la mezcla añadir algo de huevo, no demasiado, para que quede entre la mezcla. Servir sobre pan tostado o para tenedor. (otra alternativa es añadir champis bien hechos).

On egin!

tapiz de ternura

tapiz de ternura
Una princesa había nacido en el reino. Los juglares y las hadas llegaron para cantarle y hacerle sus regalos más preciados: las canciones más hermosas y los dones más ansiados.

En las fiestas por su nacimiento fueron sucediéndose las canciones, fueron entonándose los versos más bellos que se habían escuchado en el reino. Se celebraron fiestas y banquetes y un día, al final de una larga sobremesa, llegó el momento de que las hadas le hicieran sus regalos. Regalos para ayudar a vivir a la princesa a lo largo de su vida.

Las hadas eran tres. La primera le regaló la inteligencia para aprender las cosas importantes de la vida. La segunda, empatía para entender a las personas que le rodeasen mientras iría creciendo y la tercera, la tercera le regaló un tapiz de ternura, un hermoso tapiz hecho por la manos mágicas de los elfos que viven en el bosque del cariño, entre los árboles más viejos y más sabios.

Mientras le entregaba el tapiz, le recitó los versos que había escrito un poeta de los elfos, hacía ya mucho tiempo, cuando tejieron otro tapiz, para otra princesa:

“tejer con mis manos
un hermoso tapiz
arroparte con él, mimar
tu dormir y tu respirar,
posar mi caricia en ti
pausar el tiempo,
sosegar el alma y llorar
lágrimas que arropen tu sentir,
ternura que acune tu vivir”.

21 octubre 2006

pajarillo herido

Pajarillo herido


Hoy he ido al parque a pasear, contemplando las luces que los árboles de otoño deja pasar entre sus hojas y sus ramas, los tonos que el otoño va dibujando en la vegetación. He disfrutado con la vista, el oído, el silencio roto por los cantares de algún pájaro entre las ramas de colores cálidos.

Junto a un árbol, he encontrado un pájaro herido, con el ala estropeada por algún caprichoso golpe de viento. A su alrededor, los demás pájaros saltaban, subían y bajaban, mientras él trataba de arreglar su ala estropeada, con su pico, con el calor entre las hojas de otoño y bajo el árbol protector.

He seguido paseando y, al volver, he vuelto a ver al pájaro, intentando sus primeros vuelos y tratando de subir una y otra vez al cielo. Cada vez lo conseguía un poco mejor y su ala parecía fortalecerse algo más. Al final ha volado, ha recorrido la distancia entre el suelo y el árbol más cercano, una rama baja. Después ha saltado de esa rama a otra más alta de otro árbol y a otro árbol. Al final lo he perdido de vista.

Que tengas suerte pajarillo y no tengas más malos golpes de viento que te estropeen las alas. Vuela alto.
Modesto. 21 de octubre de 2006 (para Miren)

una cita culinaria enviada por Javi y la receta de la semana: langostinos al horno.

"Hay pueblos que tienen apetito y no tienen qué comer,
hay pueblos que tiene comida en abundancia y no tienen apetito,
los vascos tenemos ambos, loado sea Dios"
LANGOSTINOS AL HORNO

Pónganse los langostos con las patas para arriba, uno en cada dirección (cabeza con cola).
Después de salar, añádanse los tres líquidos: buena chorrotada de wiskie, zumo de limón y aceite con ajitos sofrito previamente.
Luego los tres sólidos: perejil, pimienta blanca molida (espolvorear con las yemas de los dedos para evitar que se concentre demasiado) y colocar unas bolas de mantequilla cada seis centrímetos.
Poner el horno a media temperatura después de haberlo calentado bien y esperar a que se les ponga tiesa (la cola) como producto del calor y que cojan un tono dorado.
Enseñar la maravilla de presentación y después revolver bien para que coja sabor.
Servir y comer.
On egin. Agur bero bat eta eguna ondo pasa.

cometas perro niño (una buena combinación)



Este es lur, nuestro perro y hoy ha ido al parque a jugar con Beñat y conmigo.
Es un buen perro y es un buen hijo.
Modesto 21 octubre 2006

a volar, cometas o sueños.

vuelos
Volar ha sido siempre un sueño, una metáfora para acceder a mundos desconocidos para nosotros. Dicen que cambió la prespectiva de nuestra visión del mundoq ue nos rodea, desde que pudimos ver el mundo desde arriba. Los campos de trigales y viñas son muy diferentes vistas desde el aire.
La libertad, ansiada siempre por los poetas y los escritores, se ha expresado con mil metáforas y mil modos, pero con el denominador común es el ansia de desatarnos de la ley que nos mantine anclados al suelo y de la que quisiéramos liberarnos, como de otras mil ataduras físicas que no nos dejan hacer lo que queremos.
Escena de la obra de teatro "historia de mi vivir (teatro para sentir):
Los actores: Modes y una joven.
En el rectángulo, sentados uno frente a la otra, se encuentran y se dan las manos.

Modes: ¡Qué bien se está aquí! ¡Qué plenitud verme contigo charlando desde los ojos!

Joven: Quiero volar, quiero cruzar cielos nuevos, donde los paisajes cambian, donde los ríos rápidos bajen desde los montes y yo los siga, donde bajo la sombra de otros árboles y de otros bosques, aprenda nuevas canciones y viva nuevos papeles con otros actores.

Modes: Vuela libre, hija, vuela alto. Disfruta de los paisajes, de los ríos, de los valles, de las sombras y de lo que encuentres.

Modes se abraza con ternura la joven.

Modes: Pero no olvides nunca que este rectángulo existe, que puedes volver, que puedes volver cuando quieras y, cuando vuelvas, me encontrarás esperando, en mi intimidad, para compartir contigo conversación y mesa, canciones nuevas y viejas, algún consejo de viejo y la ilusión de saberte creciendo libre y volando alto.

Joven: Puedo pegarme algún golpe, por volar tan alto.

Modes: Es igual. Siempre tendrás este espacio y estaremos tu madre y yo para esperarte.

Joven: Gracias aita.

Despedir nuevos vuelos y desear que los hojos-as vuelen alto. Es un deseo para todos los padres y madres.

Un abrazo. Modesto 21 octubre 2006


19 octubre 2006

Poema de amor sensual

Recuperado también de la misma obra de teatro antes citada, vaya este poema para que cada quien se lo dedique a quien quiera, con pasión, con mimo, con dedicación.
Mis manos quieren vestirte
de ternura trasparente
de nuevos tules azules
deseos sin final, salidos
de mis entrañas más dulces.

Mis labios quieren saberte,
recorrer tu geografía,
no dejar valle ni monte.
Mis ojos aspiran ser
compañeros de tus viajes
colarse en tus equipajes
y, polizón de tu alma, yo
amar contigo eternamente.
Este cuento forma parte de una obra de teatro para ser leída:
"Historia de mi vivir (teatro para sentir)" Modesto Amestoy
escrita entre enero y mayo de 2004.
Modesto 19 octubre 2006

un cuento para los sobrinos más pequeños


un cuento para los sobrinos más pequeños y para los amigos-as más grandes.

Para acabar este día de otoño, qué mejor cosa que un cuento para todos-as, aunque la imagen de los cuentos siempre será unos niños-as alrededor del que lo cuenta.

“El arroyo y el tiempo”.

En un país, sin que importe demasiado cuál, vivía un niño, o niña, tampoco tiene la más mínima importancia, en una casa de montaña y cerca de la misma existía un arroyo al cual acudía de vez en cuando a jugar, a lanzar piedras, a saltar o a bañarse con sus amigos.

Eran tiempos sin prisa donde cada momento era independiente de los anteriores y de los siguientes. El niño y el arroyo transcurrían sin prisa por el paisaje.

Creció el niño y se fue haciendo mayor. Empezó a experimentar inquietud por ver dónde empezaba y acababa el arroyo y solía correr por las orillas del mismo hasta el nacedero donde empezaba y hasta el río grande donde acababa.

Cuando quería llegar al final del río y encontrarse con otras personas jóvenes como él, el arroyo le parecía demasiado lento y quería que fuese más rápido, que no se demorase entre las piedras y en los recodos.

Saltaba de piedra en piedra, de orilla a orilla cuando podía y acortaba el camino hasta su destino.

Siguió creciendo y llegó a una cierta madurez. Sus cabellos empezaron a escasear y las preocupaciones, los trabajos (tenía que llevar cosas de las huertas hasta el final del arroyo), las gentes que con él vivían, le mantenían ocupado y preocupado.

Trataba de disfrutar del arroyo mientras caminaba, pero el río seguía su curso imperturbable. Le hubiera gustado sentarse en cualquier recodo, sobre cualquier piedra, pero las obligaciones le impedían el parar, debía continuar hasta el final y acabar sus obligaciones.

Cuando regresaba hasta su casa, hubiese deseado que el arroyo bajase más despacio, poder disfrutar de pequeños altos en sus quehaceres, pero no era fácil, siempre había algo que hacer y el arroyo no se paraba.

Una tarde, al volver hacia casa, se encontró con un amigo de la infancia, cuando todo parecía una sucesión de momentos independientes y se sentaron un rato junto al arroyo. Charlaron, se preguntaron y contestaron, y parecía que el arroyo no se moviera. Estaba anocheciendo y sintió lo bien que estaba por dentro, aunque el arroyo no se había detenido, él había sentido que casi lo había conseguido. En su interior el arroyo se había remansado, habían desaparecido sus prisas y sus saltos.

Se prometió a sí mismo parar de vez en cuando en ese u otro recodo y dedicarse a escuchar el bosque, los cantos, el silencio, su respirar y sus pensamientos, salirse del rápido discurrir de todos los días.

Pero no era fácil, no encontraba tantos momentos. Fue aprendiendo y encontrando con más facilidad cada vez esos instantes.

Nuestro personaje siguió creciendo, sus cabellos eran cada vez menos y su cuerpo iba encorvándose; sus andares, cada vez más lentos, le llevaban al arroyo, sin obligaciones, y volvía a sentir su transcurrir de nuevo como momentos independientes. El agua estaba hoy aquí, mañana allí, no importaba, lo importante era que siguiera su curso.

Solía llevar a su nieto pequeño en alguno de sus paseos y sonreía bajo la sombra de algún roble, mientras el pequeño lanzaba piedras, saltaba al agua, al transcurrir sin tiempo del agua. También veían pasar de vez en cuando a algún vecino más joven, casi sin tiempo para saludar, buscando el final o el nacer del arroyo y esperaban al atardecer la vuelta de su hijo, de sus idas y venidas.

Un día, se sentaron juntos a observar los últimos juegos del niño, antes de volver a casa y mirando a los ojos del hijo, que observaba y le decía al nieto que era tarde, que tenían que volver a casa, le pidió que estuviera tranquilo, que la prisa no les iba a hacer ganar tiempo. De repente, le pareció que el arroyo se detenía, que dejaba de correr. Encontró una lágrima en los ojos de su hijo y de su nieto. No veía ya el arroyo.

Ese día volvieron solos a casa nieto e hijo. El abuelo se había fundido en el arroyo que, como siempre, continuaba con su eterno transcurrir, entre los montes, hacia otro río.

Este cuento forma parte de una obra de teatro para ser leída:
"Historia de mi vivir (teatro para sentir)" Modesto Amestoy
escrita entre enero y mayo de 2004.
Modesto 19 octubre 2006

frases para reflexionar, también en otoño

A imitación de mi amigo Juanan, gran coleccionista de palíndromos y frases célebres, publico aquí algunas que he recogido últimamente:

Hay un único lugar donde ayer y hoy se encuentran y se reconocen y se abrazan. Ese lugar es mañana.

Eduardo Galeano

En ciertos oasis el desierto es sólo un espejismo.

Mario Benedetti

Al fin y al cabo, somos lo que hacemos para cambiar lo que somos.

Eduardo Galeano

Los hombres inteligentes quieren aprender; los demás, enseñar.

Anton Chejov

La utopía está en el horizonte. Camino dos pasos, ella se aleja dos pasos y el horizonte se corre diez pasos más allá. ¿Entonces para que sirve la utopía? Para eso, sirve para caminar.

Eduardo Galeano
No sé si os gustarán más o menos, pero hay que reconocer que los tíos piensan y aportan sabiduría a nuestros otoños. Hoy seguimos de otoño.
Modesto 19 octubre 2006

en otoño, patitas de cordero (receta de la Marina)

Ahora en otoño, es un buen momento para preparar unas patitas de cordero (o de cerdo, que tampoco están mal). Esta receta me la pasó mi madre y en su honor la publico aquí:

Patitas de cordero

Limpiar bien si no las has comprado limpias.
Cocer con abundante cebolla en la olla 20 minutos.
En una sartén, rehogar con aceite, cebolla, pimiento verde, pimiento rojo, puerro picadito y ajo (todo bien picado). Añadir jamón con algo de tocino y chorizo en tacos. Seguir rehogando. Añadir algo de harina o espesante y después las patas cocidas.
Añadir agua, vino blanco y pimentón (mezcla de dulce y picante) y un par de cayenas.
Dejar que siga cociendo y se mezclen los sabores.
También se le pueden añadir unos callos, que son muy buenos para el estómago.
On egin.
Modestok urriaren 19an.

hoy es un típico día de otoño

Hoy, al mirar por las ventanas y ver la serenidad del cielo encapotado en gris continuo, la lluvia suave que golpea con sus nudillos los cristales, parece más suave el otoño, más tierno y acogedor mientras estamos al calor de la casa, del hogar y del fuego, aunque sea imaginario.
En mi interior la calma momentánea, la sosegada espera mientras transcurren las horas, me ha hecho recordar unos poemas que escribí a las distintas estaciones, representándolas en diferentes árboles. El del otoño era el haya.

Otoño

Haya

De tus ramas van cayendo sedosas
tristes hojas rojas ya sin consuelo
cubriendo la tierra, mirando al cielo
son de su propia sepultura las losas.

Dan su vida y vierten poderosas
su último canto y su vital anhelo
pudrirse en las entrañas de ese suelo
resurgir en savia nueva, gloriosas

Haya en tonos rojos engalanada
apura del otoño los calores
derrama en la tierra tu fértil llanto

de hojas convertidas en sutil manto
espera que nuevos verdes colores
recubran tu estructura esperanzada.
Hay tristeza en las imágenes del otoño, pero hay paz, quietud de un futuro que se aletarga, se agazapa ante nuestros ojos y nos obliga a reposar a la espera de nuevos renaceres y nuevas estaciones.
El empleo de las estaciones como metáfora de las distintas edades del hombre y de distintos estados de ánimo humanos ha sido recurrente en los poetas y en las personas. Quizás, para nosotros, cuarentones, esté acabando el verano y empecemos a notar los primeros síntomas de un otoño que, espero, nos traiga paz y quietud a la sombra de este haya engalanada cuando paseemos y al calor del fuego del hogar, cuando descansemos.
un buen otoño a todos-as.
19 octubre 2006 Modesto

18 octubre 2006

hoy un poco de gastronomía: MARMITAKO

Tal y como me enseñaron mis amigos de Lekeitio, aquí queda constancia de una buena manera de hacer el marmitako. Que aproveche a quien se atreva a prepararlo.

Marmitako de bonito.

Ingredientes para cuatro personas:
Cebolla blanca
Cebolla roja
Pimiento verde
Pimiento choricero
Patata
Bonito
Aceite, sal y agua.

Rehogar en una cazuela grande pimiento verde abundante y cebolla blanca y roja. Cuando esté muy pochada, añadir la patata troceada (rota), pimiento choricero (su carne) y seguir rehogando. Añadir agua cubriendo la patata y dejar cocer hasta que esté blanda. Comprobar la sal. Cuando le falten cinco minutos a la patata, añadir el bonito en trozos.

On egin guztioi!
Modes urriaren 18an

homenaje a mis hijas

hoy quiero recordar un poema que les escribí hace tiempo y que la vida nos va contrastando un poco más cada vez que crecemos:

A MIS HIJAS
¿CÓMO CANTAROS, BROTES DE MIS ENTRAÑAS?

Alargais vuestra figura,
discutis nuestra ternura
y sentís cómo las hojas
de mi tronco envejecido
van dando nuevo tejido
entre vuestras ramas rojas.

Voraces, devorais golosas
saberes y aprendizajes
construyendo nuevos trajes
ansiosas, saltais las losas
del futuro que era nuestro.
Saboreadlo, hoy es vuestro.

Y cuando deis nueva vida
repitiendo la experiencia
sin contradecir la ciencia
llorareis con voz sentida
desde el presente inseguro
que es de otros el futuro
¿Cómo enseñaros, brotes de mis brotes?
Valga de reconocimiento a dos mujeres impresionantes que se están haciendo y acabarán siendo grandes personas. Un beso.
Modes 18 octubre 2006

Hay días en que el sol nos sonríe más tibio.

hay días en que el sol nos sonríe más tibio

Hay días para todo y hoy ha amanecido con el alma más tibia, más reconfortada con la mirada de los que me rodean y las frases de los que me quieren.
Es una gozada saberse querido, atendido desde las almas de los que me rodean.
Sus frases, sus miradas cálidas y sus gestos reposados rellenan de ánimo las fuerzas que necsito para seguir.
Por eso quiero rescatar un poema más cálido, más tierno.
Que lo disfrutéis:


VIVIR CONTIGO

Traspasar tu horizonte luminoso
atreverme a cantar con voz potente
colores de color vertiginoso
reposando en tu vientre cuerpo y mente.

Ralentizar mi transcurrir ansioso
enjugar las lágrimas del camino
sentir las plenitudes, deseoso
de conquistar la paz del peregrino.

Beber paz en el cuenco de tus manos
trocar en aire tibio el frío viento
fundir en tu paisaje mar en calma.

ver juntos madurar brotes tempranos
verme y vivirme al fin. mujer, te siento
compañera de piel futuro y alma.

Por supuesto está dedicado a la mujer con la que llevo compartiendo los últimos treinta años, más o menos.
Un abrazo a todos.
Modesto 18 octubre 2006

17 octubre 2006

NANA EN TRES ACTOS
Hoy entre el 17 y el 18, me han escrito las dos personas que van a ser padres-madres dentro de poco y me han comentado lo que les gusta este blog. Son grandes amigos. Para ellos y ellas (sus parejas) para javi y Susana, vayan mis versos escritos a una niña que nació hace unos meses y para sus padres-madres.
NANA EN TRES ACTOS, QUE SON LOS QUE TIENEN QUE SER
(nana integrada o integral o integrativa...)


MADRE

Duerme, mi niña.
Descansa en mi vientre dolorido
mientras mis manos acunan
tu cuerpo sin tiempo,
mientras mis lágrimas tejen
canciones que arrullen tu alma.

Duerme, mi niña.
Sueña en tus ojos mi piel,
sudorosa y esforzada,
mientras mis palabras secan
tus lágrimas recién aprendidas,
tus llamadas nuevas y llenas
de necesidad de madre.

Duerme, mi niña.
Come mi leche y llena
de esperanzas y de lunas,
tus noches y días nuevos,
de colores de mi sangre,
tus sonrisas y tus manos,
que me buscan, que me sienten.

Duerme mi niña
junto a tu madre cansada,
descansa y sueña.


PADRE

Duerme, mi niña,
duerme mujer,
descansa tu cuerpo dolorido
en el capazo de sentimientos
de mi corazón emocionado.

Quiero tejer una cuna
con lágrimas y palabras tiernas,
para que duerman muy juntas
la niña y la madre solas.
Quiero pintar un regazo
de ternura y emociones,
donde descansen del parto
la madre y la niña nuevas.

He descubierto tus ojos
de luz recién encendida.
Han caído sobre ti,
tiernas y temblorosas,
mis lágrimas de padre enganchado
al cordón indivisible
que nos une y nos mantiene
enlazados de por vida.

He besado tus labios de madre en la mezcla
de dolor y felicidad,
saladas lágrimas bellas
en tus labios de mujer,
entreabiertos al futuro,
en tus brazos tiernos de madre,
compartidos con los míos.

He sido padre.


NIÑO-A


Quiero que me protejas,
que me digas mil canciones
de sabores y colores.
Que me llores y me rías,
que descubras mis sentidos
al mundo que me recibe.
Quiero que me quieras,
con mi cuerpo y mis manitas,
que me cojas y me arrulles,
con suaves y cálidas notas
de canciones y emociones,
mezclados en tu sonrisa,
todo es nuevo.
Quiero que me protejas.
Dejo aquí mis palabras y mis sentimientos, mis emociones y mi cariño de padre de hijos-as mayores. Que todos-as podamos seguir el camino de nuestros hijos-as con emoción y compañía tierna.
Un abrazo y hasta mañana.
Modes
Reflexión 17 de octubre



Hola lector a quien no veo, hay días que ni quiero, no por no desear la comunicación sino por no ver reflejada en tus ojos mi tristeza. Ya me vale con ver en mi alma la larga y oscura sombre de mi tristeza. Hay momentos en la vida en que se agolpan los motivos para ensombrecer la realidad, los momentos en que convivimos con la parte menos agradable de nuestras vidas.

Pero no me quiero quedar ahí, ensartado entre momentos y recuerdos tristes, como un san sebastián indolente y sin respuesta posible. Quiero ver más allá, necesito ver más allá y, al mirar, con la dificultad de encontrar motivos de alegría en el futuro, en ese desconocido y temible amigo?, entrebusco en los recuerdos y las memorias del pasado, de ese entrañable aunque a veces no tan bonito como quisiéramos amigo!.

Este vaivén de futuro incierto y pasado de todos los colores, ese ir y venir entre el optimismo y la negrura, me lleva a buscar en los poemas que escribí hace tiempo y ofrecer a la visión y reflexión, no sé si de alguien o de nadie, pero que libera un poco mi necesidad de expresión:

A este río, camino de tiempo y de vida
en el estío sin agua, se le ve la herida,
se adivinan en el fondo las ramas y las piedras
secos fangos, grises hiedras.

Río en el presente dolorido
imploro al cielo lluvias tan urgentes
que llenen de verdor estas heridas
de líquido limpio y nuevo tus caudales
que vengan de esos montes a raudales
litros y litros de nueva vida
frescor, verdor y sombra a tus orillas.

Cerca está ya la primavera
que traerá a tu cauce sus milagros
agua que te limpiará los males
de la sequía que hoy te ha envejecido,
que reverdecerá la hierba
agostada por los males y los vientos,
que fortalecerá a tu alrededor los árboles
llenando de sombra fresca la alameda
mientras cantan los hoy ausentes ruiseñores.

Volveré a tus orillas otro instante
a pasear con tus sonidos y tus sombras
a detenerme junto a tu murmullo
cadencioso y tranquilo, casi humano,
reflejo del vivir de mis hermanos,
a sentir tu serena y silenciosa compañía
como siento hoy en el alma tu sequía.


Serás de nuevo arroyo caudaloso
de vida y de tiempo, suave camino
que marca los rumbos al peregrino
y deja su murmullo cadencioso.

Al atardecer, suave y silencioso
dejaré el cayado, refrescaré vino,
vislumbrando en tus aguas el destino
mi discurrir de río, mi reposo.

Al amanecer sentiré el rocío
milagroso de tu otra nueva vida
anunciando el final del seco estío

acunando el bálsamo en la herida
devolviendo al cauce de este río
el agua y la esperanza revivida.

Modesto febrero 2001

Lo releo hoy y aplicado a diferentes personas, me emociona y enmarca con una tierna sonrisa mis lágrimas de compasión, secas a veces y siempre sanadoras.

Un abrazo a quien esto lea.

Modesto octubre 2006

16 octubre 2006

ALGUNAS FOTOS






Poema de amor:


Momentos de placer atemporales

Me miras a los ojos y presiento
piel y sangre ardiendo en tu mirada
imán que me arrastra hacia tu nada
me falta, por faltarme, hasta el aliento

Quiero plasmar el mundo en un momento
lanzarte mis desmanes en manada
susurrar la canción nunca cantada
ser de tu sed de amor el alimento

Envuelta frente a mí en suaves tules
gózame y aplaca el dulce tormento
que traspasa mi piel con mil cristales

Guía mis sentir hasta los azules
cielos donde termina el sufrimiento
placer y amor de sueños inmortales
Poemas de mi sentir.
Poema que intenta explicar mi concepción de la poesía en comuníón contigo lector

Mirar para adentro y sentir
los paisajes de mi alma
cantar contra el viento y saber
tejerlos con letra y pasión,
es mi trabajo lector.

El tuyo es captar, revivir
poemas sentidos en calma,
oír el sonido y leer
la brisa que llega canción,
completar mi ser creador.
algo de poesía para pensar:
Ahora que un par de amigos están esperando un hijo e hija, retomo la poesía que le escribí al mío antes de nacer.
Acogeré entre mis manos
tu cuerpo sin tiempo, tanto
que beberé con delirio
tu alma, tu primer llanto.

Entre mis verdes ventanas
apuntarán unos brillos
gotas alegres, futuro
nueva sombra de mí mismo.

Acunarás tú mi alma
de viejo tejo y mi canto
arrullará tu reposo
pequeño, sutil, rosado.

Como hoja recién abierta
temblarás mientras tú creces
escrutas el nuevo bosque
y sueñas amaneceres.

Te sueño, hijo, te vivo.
receta de lasagna mixta para empezar a hacer boca

1- cocer las placas de lasagna.2- preparar la carne picada con calabacín, zanahoria y pimiento verde troceados y rehogados.3- preparar otra mezcla de gambas, calabacín, zanahoria y p. verde rehogados previamente y añadir bechamel al gusto.4- acabar de pasar unos piquillos por la sartén.
Colocación de la lasagna:capa de placasrelleno de carnecapa de placascapa de piquilloscapa de placasrelleno de gambas (o langostinos)con bechamelcapa de placasun poco de bechamelespolvorear queso rallado
5- hornear hasta que esté dorado.
Bon apetit!Creo que es muy sana y está buenísima.Un saludo.